EL DIGITAL DE CASTILLA LA MANCHA
DECLARACIONES
Peces-Barba exige a Cospedal que pida perdón por lo de Bono
El ex presidente del Congreso y ponente de la Constitución de 1978 Gregorio Peces-Barba exigió hoy a la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, que pida "perdón" al actual presidente de la Cámara Baja, José Bono, por la "arbitraria" campaña que, a su juicio, ha orquestado contra él, a cuenta del incremento de su patrimonio, movida por un "muy poco decente interés electoral".
En declaraciones a Europa Press, el que fuera rector de la Universidad Carlos III hizo un alegato en "defensa de la dignidad y del respecto a las personas" algo que, a su juicio, "no se puede perder" en ningún caso.
"Es muy arbitrario hacer un ataque sin unos fundamentos, sobre todo cuando se trata de una autoridad del Estado", enfatizó, antes de emplazar a la número dos del PP a reflexionar sobre la gravedad de la campaña que le achaca y que, a su juicio, ha impulsado movida por un "muy poco decente interés electoral".
En cualquier caso, Peces-Barba, que fue el primer socialista que ocupó la Presidencia del Congreso en esta etapa democrática, se mostró convencido de que "la verdad" hará que los ataques a Bono por su patrimonio acaben cesando. "Como no hay ningún motivo, no podrán seguir", concluyó.
En un artículo que hoy publica en el diario El País, Peces-Barba asegura que no hay duda ninguna de que la "conspiración" contra Bono se puede atribuir a Cospedal, que en su opinión sabe que no hay materia para denunciar al presidente ante el Tribunal Supremo y por eso no lo hace.
También afirma que el PP practica el "calumnia que algo queda", que le recuerda a las "embestidas masivas" que él mismo sufrió cuando era Alto Comisionado de apoyo a las víctimas del terrorismo. "Hoy esas actuaciones reaparecen con un ataque sin precedentes, por su dureza y su malicia, contra la tercera autoridad del Estado", remacha.
Guerra elogia delante de Bono la "austeridad" de Pablo Iglesias
Las figuras más destacas del PSOE de los últimos años coincidieron ayer en el Congreso en la celebración de los 100 años del Grupo Socialista. El acto se convirtió en un cierre de filas en torno al Gobierno.
Por la mañana, coincidieron en una mesa redonda Alfonso Guerra y José Bono, viejos enemigos de partido. Guerra aprovechó su intervención para subrayar, en presencia de Bono, la “probada austeridad” de Pablo Iglesias y la coherencia de su mensaje vital. El presidente del Congreso, que a juicio del PP aún no ha dado explicaciones suficientes sobre el origen de su extenso patrimonio inmobiliario, escuchó resignado las palabras de Guerra.
viernes, 11 de junio de 2010
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