domingo, 2 de diciembre de 2012



EL CONFIDENCIAL
02 DE DICIEMBRE DE 2012

UPyD PIDE EL CONTRATO SUSCRITO CON DRAGADOS
El Congreso reclama la correspondencia de Bono y Salgado para aclarar las obras en la Cámara


Los misterios de las actuales obras del Congreso, encargadas sin publicidad por el anterior Gobierno a instancias de José Bono, estimulan la curiosidad de algunos grupos parlamentarios que prueban a intentar aclararlos por vía reglamentaria. Después de que El Confidencial sacara a la luz las instrucciones escritas del anterior presidente de la Cámara a la vicepresidenta económica, Elena Salgado, UPyD exige al Ministerio de Hacienda (donde está ahora Patrimonio del Estado) que le remita toda la documentación sobre las obras.
La diputada Rosa Díez se acoge al artículo 7 del Reglamento del Congreso para que la Cámara obligue a la Administración (en este caso Hacienda) a facilitarle toda la documentación solicitada o, si se niega, a que en un plazo no superior a 30 días informe al presidente de las Cortes sobre “las razones fundadas en derecho que lo impidan”.
La parlamentaria de UPyD recurre a ese trámite, más directo que la pregunta por escrito dirigida al Gobierno, para aclarar esa ‘herencia’ de Bono que tiene el Palacio patas arriba desde hace dos semanas: vallado, con grúas, casetas y zonas de carga y descarga en la puerta de los leones, la acera correspondiente y los patios interiores.
Las obras acometidas por decisión de Patrimonio del Estado son de una envergadura y duración que nadie tenía previsto. Hasta el extremo de que se han tenido que suprimir las tradicionales jornadas de puertas abiertas que se celebran desde 1996 con motivo del aniversario de la Constitución, además de la recepción del día 6 de diciembre, que se ha pasado al Senado. Para reparar la cubierta, recuperar dos salas y poner orden las instalaciones exteriores del Palacio, la empresa constructora calcula que tardará unos ocho meses.
Rosa Díez pide toda la documentación sobre las obras: el expediente de contratación, el contrato suscrito con la empresa adjudicataria del concurso con todos sus anexos y calendario de ejecución, informes técnicos que justificaran las necesidad de las obras y toda la correspondencia existente entre el Ministerio de Economía o el actual de Hacienda y Administraciones Públicas, que es de donde ahora depende la dirección general de Patrimonio.
El deterioro de la cubierta del Palacio del Congreso era evidente desde hace años y los grupos no cuestionan que se tenga que reparar, pero quieren explicaciones sobre todo lo demás: el origen el contrato, la licitación de las obras y el retraso en su puesta en marcha. Bono pidió a Salgado en febrero de 2011 que el concurso se hiciera sin publicidad, Patrimonio obedeció y sólo invitó a las 5 grandes constructoras (Ferrovial, Sacyr, OHL, Dragados y Acciona) a que se presentaran. Aunque el proyecto ascendía a 7 millones de euros, al final se lo quedó Dragados (Florentino Pérez) por 4,5 millones.

sábado, 24 de noviembre de 2012

EL CONFIDENCIAL 22 DE NOVIEMBRE DE 2012 INVITÓ A LICITAR A LAS 5 GRANDES CONSTRUCTORAS Bono instó a Salgado por escrito a que adjudicara sin publicidad las obras del Congreso http://www.elconfidencial.com/espana/2012/11/21/bono-insto-a-salgado-por-escrito-a-que-adjudicara-sin-publicidad-las-obras-del-congreso-109665/ José Bono resulta ser el promotor de las obras acometidas en el Congreso desde la pasada semana y que han obligado a anular las celebraciones del Día de la Constitución de este año (como adelantaba en exclusiva El Confidencial), jornadas de puertas abiertas incluidas. Así lo acredita una carta enviada en febrero de 2011 por el anterior presidente de las Cortes a la entonces vicepresidenta segunda del Gobierno, Elena Salgado, a la que ha tenido acceso El Confidencial, y que incluía la petición de que la reforma se encargara “sin publicidad” por los intereses de “la seguridad del Estado”. Patrimonio, entonces dependiente del Ministerio de Economía, sólo invitó a licitar a las 5 grandes constructoras: Ferrovial, Sacyr, OHL, Dragados y Acciona. En vez de facturas sin pagar, la herencia que se ha encontrado la actual Mesa del Congreso con el cambio de presidencia consiste en unas obras retrasadas, tan aparatosas como inaplazables, que complicarán el tránsito y el acceso al Palacio de la Carrera de San Jerónimo hasta el próximo verano. Entre la petición de Bono a Salgado y la decisión de Patrimonio del Estado de invitar a las empresas elegidas para licitar en un proyecto que ascendía a los 7 millones de euros, pasaron ocho meses. Después, los trámites se fueron alargando y hasta junio de este mismo año no se adjudicaron las obras a Dragados por 4,5 millones de euros. El 5 de noviembre empezó el vallado del edificio y llegaron a la puerta de los leones, a las aceras adyacentes y a los patios las bases para las grúas, las casetas, los andamios, y las zonas reservadas para carga y descarga. Ayer, Jesús Posada explicó a los miembros de la Mesa del Congreso y a los grupos que en esas condiciones era imposible celebrar los actos habituales de la Constitución y que había decidido trasladar la recepción del día 6 de diciembre al Senado previa consulta con su presidente, Pío García Escudero. Los partidos de la oposición no pusieron pegas en la reunión, pero la portavoz del PSOE, Soraya Rodríguez, comentó luego que las obras se podían aplazar. También insinuó que Posada, al suspender los actos, quería evitar problemas con el 15-M y los grupos que convocan cercos o asaltos al Congreso en los últimos meses. Pero las dudas sobre la reforma residen en la tardanza en acometerla (las filtraciones y goteras son un problema acuciante desde hace años) y en el procedimiento elegido. En el escrito remitido por Bono a Salgado el 10 de febrero de 2011, el entonces presidente de las Cortes explicaba que la dirección general del Patrimonio del Estado “ya conoce” la necesidad de rehabilitar la cubierta del Palacio del Congreso para proteger la integridad del edificio. Bono dio las pautas que debía seguir el Ministerio de Economía. Como la contratación de los trabajos requería facilitar a las empresas los planos del Palacio, así como “las numerosas instalaciones que se encuentran en la cubierta”, el presidente del Congreso indicaba que “no debería procederse a la convocatoria de un procedimiento abierto, sino que debería procederse a la convocatoria de uno negociado sin publicidad”. También añadía que la Mesa del Congreso (Órgano que él presidía) había considerado en su reunión del día 8 de febrero que “concurren intereses esenciales para la seguridad del Estado que deben ser protegidos en la contratación del proyecto y obras de rehabilitación de la cubierta del Palacio del Congreso de los Diputados”. Reformas para los grandes e inaplazables Elena Salgado procedió como le indicaba Bono, sin publicidad, pero se tomó su tiempo. Patrimonio del Estado no tuvo listo hasta junio el pliego de prescripciones técnicas, que además fijó el importe de licitación en 7.080.000 euros. Las invitaciones a las empresas no se hicieron hasta octubre de ese año, con las Cortes recién disueltas. La oferta a concurrir sólo llegó a las cinco grandes compañías de la construcción: Ferrovial, Sacyr, OHL, Dragados y Acciona. En mayo, ya en la nueva legislatura, se emitió el informe técnico de valoración de las ofertas. Las obras quedaron adjudicadas a Dragados al mes siguiente por un importe mucho más bajo que el límite propuesto: 4.530.966 euros. En fuentes de la Mesa del Congreso insisten en que se encontraron todo hecho desde Patrimonio del Estado. La magnitud de la reforma y las consecuencias sobre del desarrollo de la vida parlamentaria es lo único que aspiran a paliar, mientras que el grado de deterioro de la cubierta impedía aplazar más los arreglos, según aseguran en los mismos medios. Lo que temen ahora en la Cámara es que las reformas se alarguen, como es habitual en todas las obras, y no estén terminadas hasta el próximo otoño.

martes, 13 de noviembre de 2012

EL DIGITAL DE CASTILLA-LA MANCHA PRENSA INTERNACIONAL The Wall Street Journal llama "mediocre" a José Bono en un duro artículo http://www.eldigitalcastillalamancha.es/articulo.asp?idarticulo=119887 El periódico estadounidense The Wall Street Journal ha publicado un duro artículo de crítica al sistema político español al considerar que promociona "mediocres" como los socialistas José Bono y José Blanco o el popular José Ignacio Wert, al que el diario le recrimina que propusiera el "españolización de los niños catalanes para resolver la crisis" sobre la independencia catalana, según informa este viernes El Periódico.com. El rotativo estadounidense lamenta la importancia en España del "enchufismo" -dice literalmente-, denuncia el elevado peso de la maquinaria de los partidos en el sistema electoral y critica que la elección de los candidatos la hagan los líderes de los partidos y no los votantes y que los electores sólo puedan votar listas cerradas a los comicios. Estas son las explicaciones que da el artículo, firmado por Raymond Zhong, a la siguiente pregunta: "¿Por qué existe esta disfunción en la clase política española?". The Wall Street Jorunal compara el exministro José Bono con un gobernante populista de América Central y denuncia que el también exministro José Blanco recibiera la Cruz de la Orden Española de Carlos III en diciembre pasado, solo dos días después de que el Tribunal Supremo abriera una investigación por un presunto soborno. El texto denuncia la importancia del amiguismo y el clientelismo en España y critica la politización de órganos como el Tribunal Constitucional, el Banco Central, el cuerpo diplomático y las cajas de ahorros. Por lo que respecta estas últimas, va más allá y asegura: "La burbuja inmobiliaria comenzó cuando las cajas se convirtieron en vehículos para préstamos dirigidos políticamente".

sábado, 29 de septiembre de 2012

EL SOPLON
El millonario Bono se llevará 800.000 euros por su libro

El millonario ex presidente de Castilla – La Mancha, José Bono, obtendrá 800.000 euros por la publicación de un libro con sus memorias, en el que se dedica a hablar de todos sus ex compañeros.
Otro de los chismes que desvela en su libro el ex presidente castellanomanchego es una discusión con Barreda
El libro cuenta con tres tomos en los que recoge sus vivencias. En él ha obviado parte de los apuntes que afectan a Castilla – La Mancha y se centra en la política nacional, aunque sí habla de algunos miembros de su equipo más próximo como José María Barreda, Juan Pedro Hernández Moltó, Emiliano García-Page y Juan de Dios Izquierdo. También habla de su relación con la Iglesia, especialmente con el cardenal Don Marcelo, y de sus enfrentamientos con José Borrell y del PP de Castilla – La Mancha.
José Bono se dedica a criticar a ex compañeros como Hernández Moltó, contando su alejamiento. Habla de los recelos que existían entre éste y varios dirigentes del partido, entre los que se encuentra Barreda.
Bono airea que en 1995 Moltó le reprochó que Barreda nunca le reconociera como secretario general y que él hubiera agraviado al proponer “como ministra a Clementina” sin ni siquiera mencionarle su propuesta.
Otro de los chismes que desvela en su libro el ex presidente castellano-manchego es una discusión con Barreda. En 1992, le dice que se encuentra muy solo en las labores de dirección porque “Juan Pedro improvisa demasiado”. “Tú, José María, no siempre das en el clavo a la hora de elegir a tus colaboradores”, señala.
Bono también se comenta que, en 1996, Barreda se le quejó de que Moltó organizara reuniones en Ciudad Real a su espalda, faltando a “la lealtad debida”.
Un libro lleno de cotilleos y chismes, en los que critica a sus compañeros, por los que el ya millonario sumará a su cuenta bancaria 800.000 euros más.

martes, 25 de septiembre de 2012

EL DIGITAL DE CASTILLA-LA MANCHA

¿Con qué oscuro asunto amenazó Bono a varios jueces de la región que iban contra él?


José Bono es el personaje del día. Hoy presenta su esperado libro de memorias tras haber suscitado un interés gigantesco que pocos acontecimientos editoriales han tenido con anterioridad en este país. Decenas de periodistas han hablado del primer tomo de las memorias que amenaza con convertirse en el libro del año.

De entre todos los extractos que se han ido dando a conocer estos días, el que más nos ha llamado la atención es el referido a un hecho ocurrido durante su etapa de presidente de Castilla-La Mancha que publicaba este fin de semana el grupo de diarios de Promecal, entre ellos La Tribuna. Resulta especialmente curioso que este grupo editorial haya puesto el acento precisamente en este asunto ya que si se lee con atención Bono no sale bien parado. O no se han dado cuenta o han querido dejarle en evidencia, pese a la extraordinaria relación que siempre mantuvo Bono con el presidente de Promecal, Antonio Méndez Pozo. Tanto las Tribunas de Castilla-La Mancha como los diarios de Promecal de Castilla y León destacaban que Bono amenazó con desvelar supuestos casos de corrupción judicial en la región, después de que varios magistrados encargaran en 1987 al abogado Javier Sánchez Carrilero que interpusiera una demanda civil contra él, pidiéndole 40 millones de pesetas de indemnización, por unas declaraciones que hizo en televisión.

El propio Bono cuenta en el libro que habló "con un famoso magistrado de Albacete y le mostré las cintas de la conversación con una gitana a la que se prometía una sentencia favorable para su hijo si accedía a determinados favores. A otro le expliqué lo que mucha gente de Albacete decía: que un magistrado había aprobado las oposiciones a judicatura porque se presentó su hermano a los exámenes haciéndose pasar por él. La demanda contra mí no se presentó».

Bono explica que el 15 de enero de 1987 escribió una carta al presidente del Consejo del Poder Judicial en relación con el asunto del niño Andrés Fernández, que había sido multado, a sus siete años de edad, por escribirle una carta abierta en un periódico de Albacete, el 15 de julio de 1986, quejándose de que el alcalde del PP maltrataba a su padre, que era el alguacil de Jorquera.

Siguiendo la narración de las Tribunas, en el Boletín Oficial de Albacete del 9 de enero de 1987 se publicaba la sentencia número 339 en la que el juez José García Bleda condenaba al menor Andrés Fernández Santiago y a sus padres a indemnizar conjunta y solidariamente al alcalde del PP por daños y perjuicios morales con 25.000 pesetas. «A ese niño le dije en una televisión: ´Si en vez de hijo de un alguacil fueras hijo del conde de Romanones, no te habrían condenado´». Fue entonces, según desvela ahora, cuando varios magistrados encargaron al abogado Javier Sánchez que interpusieran una demanda civil contra él que, como según explica, finalmente no se presentó".

Como se ve, Bono no tiene ningún problema en contar que amenazó y de alguna forma chantajeó a los magistrados para que no se querellaran contra él. Y es que no puede entenderse de otra forma más que como chantaje el hecho de hablarles de varios asuntos turbios en los que presumiblemente estaban implicados algunos de ellos, sin que el presidente castellano-manchego hiciera nada más al respecto. Se defendió a sí mismo con esta argucia al límite de la legalidad, pero una vez resuelto su propio problema se desentendió de los turbios hechos que había utilizado para amenazar a los magistrados, pese a la gravedad de los mismos.

En fin, que si hay más citas similarea a esta en sus memorias el libro dará que hablar mucho más de los que pensamos.

miércoles, 19 de septiembre de 2012

EL DIGITAL DE CASTILLA-LA MANCHA

¿Cuál es la pregunta de la que huye Bono como alma que lleva el diablo?


Esta semana se ha presentado el famoso libro de Paloma Segrelles (madre e hija) -que dicen que dará tanto que hablar- en un acto que los asistentes han calificado de atípico, sobre todo porque faltaba una de las protagonistas (la hija), que pasa por un mal trance personal, y uno de los presentadores, el ministro Cristobal Montoro. Pero había otros, como el expresidente de Castilla-La Mancha y del Congreso de los Diputados, José Bono, que cubrió sobradamente y con maestría el hueco de los ausentes.

La cita fue en el madrileño Hotel Eurobuilding y arroparon a la ex presidenta del Club Siglo XXI personajes como Nuria Espert, José Luis Balbín y el ya mencionado Bono. Fue unas horas después de que Esperanza Aguirre diera el bombazo de su marcha por lo que en la presentación del libro no se hablaba de otra cosa.

Bono acudió con el brazo todavía escayolado después del accidente doméstico de hace unas semanas que le causó una dolorosa fractura del cúbito y el radio. Un verdadero estropicio y un incidente muy peligroso. Pese a todo, Bono brilló con luz propia y se adueñó del ambiente, como siempre. Habló del Rey: "Muchos no dábamos un duro por él, porque no le considerábamos legítimo por quien le había colocado ahí. Pero el 23-F tuvo que elegir entre los militares y el pueblo y optó por este último", y de Esperanza Aguirre: Nunca he estado de acuerdo con ella. Ahora se ha ido de la política y respeto su decisión, aunque no conozco los motivos".

Dicen que eso lo contaba con una sonrisa en la boca y que el gesto se le borró automáticamente del rostro cuando le preguntaron por la nueva pareja de su exmujer, Ana Rodríguez, escabulléndose lo más rápido posible entre los invitados.


martes, 18 de septiembre de 2012


EL DIGITAL DE CASTILLA-LA MANCHA

Bono vuelve a estar en el ojo del huracán por un escándalo de comisiones millonarias


Fue el gran contrato de Navantia, la naviera pública, durante los gobiernos de José Luis Rodríguez Zapatero: la construcción de ocho patrulleras militares por las que Venezuela ha pagado más de 1.200 millones de euros. El acuerdo se cerró de Estado a Estado, con la implicación directa de Zapatero, su ministro de Defensa, José Bono, y el presidente venezolano, Hugo Chávez. Pero este hecho no evitó que Navantia pagara 42 millones de euros a varios comisionistas venezolanos y españoles, un 3,5 por ciento del monto global del contrato.

Un juzgado de instrucción de Madrid mantiene imputados por tráfico de influencias y delito fiscal a dos ex altos cargos del PSOE que cobraron 12 millones en la venta de barcos al presidente venezolano, Hugo Chávez.

El mejor contrato que firmó la naviera pública, Navantia, durante los gobiernos de José Luis Rodríguez Zapatero, fue el de la construcción de ocho patrulleras militares por las que Venezuela pagó más de 1.200 millones de euros. El acuerdo se cerró de Estado a Estado, con la implicación directa del presidente del Gobierno, su ministro de Defensa, José Bono, y con la del presidente venezolano.

Según ABC, este hecho no evitó que Navantia pagara 42 millones de euros a varios comisionistas venezolanos y españoles –un 3,5 por ciento del monto global del contrato-. Por ello, un juzgado de Madrid ha imputado a Javier Salas Collantes, último presidente del Instituto Nacional de Industria (INI) –que salió del Gobierno en 1996-, y el que fuera su subordinado en el mismo organismo, Antonio Rodríguez-Andía. Cada uno habría cobrado seis millones de euros.

La venta de los buques se firmó el 28 de noviembre de 2005 en Caracas. Poco antes, el 30 de septiembre, Navantia firmó un acuerdo mediación con la empresa Rebazve Holding Ltd., a la que otorgó una comisión del 3,5 por ciento de la venta –42 millones de euros-. A su vez, Rebazve contrató a Rodríguez-Andía, expresidente de la pública Trasatlántica, y le pagó doce millones de euros, de los que seis terminaron en cuentas del que fuera su jefe en los primeros gobiernos de Felipe González, Salas Collantes.

El tema era ya conocido y lo publicó El Confidencial a principios de año. No se saben las razones por las que ha salido de nuevo a la luz en estas fechas, justo unos días antes de que Bono presente sus esperadas memorias. Esta primera entrega del libro no llega a esos años en los que ejercía como ministro de Defensa, pero en todo caso seguro que poco o nada va a revelar sobre el asunto de las comisiones de los buques de Venezuela, en el que algunos consideran que Bono es "el meollo de la cuestión".