La ex mujer de Bono crea una empresa dedicada al negocio inmobiliario
Desde marzo Ana Rodríguez dirige Atitlan 2011. La nueva compañía tiene como objeto social la comunicación, las relaciones públicas y la asesoría de imagen.
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La ex mujer del presidente del Congreso, Ana Rodríguez, ha decidido abrir una nueva etapa empresarial. El pasado 21 de marzo, Ana Rodríguez creó la sociedad Atitlan 2011 en el municipio ciudadrealeño de Alcázar de San Juan. La creó con un capital social de 3.000 euros y aparece como la administradora única de la misma. Atitlan tiene su domicilio social en el número 25 de la avenida de la Tecnología.
El nombre de la nueva sociedad es el mismo que el de un municipio guatemalteco y el de un lago de ese país, en el que Rodríguez, descendiente de gallegos emigrantes, vivió hasta los 12 años.
Según la Clasificación Nacional de Actividades Económicas (CNAE), la actividad de Atitlan 2011 es la compraventa de bienes inmobiliarios por cuenta propia y atendiendo a la Clasificación Industrial Estándar (SIC), el fin de la sociedad es la administración de fincas y el negociado a través de agencias inmobiliarias. Mientras, el objeto social de la empresa, según se desprende del Registro Mercantil, son las actividades estratégicas de comunicación, relaciones públicas, asesoría de imagen, publicidad, marketing, actividades artísticas y de espectáculos o la producción, organización y dirección de eventos.
Hasta el momento, debido a su reciente creación, Atitlan 2011 no ha recibido ayudas. Por otro lado, Ana Rodríguez ha pasado a ser la única dueña de Ahorros Familiares Saja, empresa que hasta el momento administraba junto a Pablo Cañego.
De esta manera, la familia Bono ha apartado de sus empresas a este administrador de Hípica Almenara que se enfrenta desde julio de 2010 a una querella por un presunto delito societario y falseamiento de las cuentas de Hípica Almenara, el negocio equino de José Bono en Toledo.
La querella de Ciudadanía Anticorrupción también se extiende a los otros administradores del centro Ramón Navas, Francisco Javier Montalvo y Alicia Cilleruelo y, como publicó LA GACETA, no afectará al ex ministro hasta conocer si se presenta como perjudicado o se le considera autor intelectual. Lo cierto es que ninguno de los gestores ha negado el enorme beneficio en las cuentas y han trasladado al presidente del Congreso la responsabilidad del incremento patrimonial.
Por su parte, Bono asegura que espera “la verdad”, que los calumniadores queden al nivel que merecen y que es “el político más transparente de España”. Saja, dedicada a la compraventa, arrendamiento y aparcería de toda clase de bienes inmuebles, es propietaria de dos áticos contiguos con plaza de garaje en el lujoso residencial Las Náyades, en Estepona (Málaga), valorados en 1,4 millones y de los que Reyal Urbis rebajó a los Bono-Rodríguez 549.460 euros.
También tiene un ático en Madrid valorado en 991.600 euros y con una hipoteca de 550.000, en donde se ubica la sede social de la mercantil. Cañego ha figurado en la mayoría de las sociedades de la familia Bono. Además de en Saja y en Hípica Almenara también fue administrador de La Atalaya 52 y de Ópalo 81. En la actualidad administra las empresas Kiosko 24 Centro y Ofisad Asesores, de Madrid y Construcciones El Abuelo Pablo, Cuatrofamily y Oficina de Servicios Administrativos, de Ciudad Real.
Cooperadora
No todo ha sido positivo para Ana Rodríguez durante los últimos meses. Se enfrenta a una querella como “cooperadora necesaria” y “beneficiaria pasiva” del enriquecimiento presuntamente ilícito de su ex marido. Tras conocer que un juzgado de Toledo instruye esta querella contra ella, insistió en la edición de marzo de la revista Vanity Fair: “Nuestro patrimonio es claro y transparente (…) Yo, como la canción, doy gracias a la vida, que me ha dado tanto”.
Lejos quedan sus años como oficinista en la sede del PSOE en Toledo, cuando Bono presidía la Junta. En esa misma entrevista también aseguró que “no” tiene la impresión de tener un nivel de vida por encima de los demás, que su familia ha sido objeto de “una caza de brujas (…) preparada por la derecha y sus medios de comunicación afines” y que la investigación de su patrimonio familiar no precipitó su divorcio, sino que fue “una decisión meditada”.
Resulta curioso que aunque hablase largo y tendido sobre su “floreciente negocio como empresaria de la marca de joyería Tous, con la que ha abierto seis tiendas entre Madrid y Castilla-La Mancha”, y de que ha convertido su coche en un fondo de armario por pasar la vida “en la carretera por trabajo”, no mencionase nada sobre Atitlan 2011, su nuevo negocio.
La separación
Ya han transcurrido 10 meses desde que los Bono hiciesen pública su separación “de mutuo acuerdo” y “de forma amistosa”, aunque en Toledo “era un secreto a voces que hacían vida por separado alrededor de un año antes de hacer oficial la noticia”, según han asegurado a LA GACETA fuentes cercanas a la pareja. Más aún que Rodríguez Mosquera “estaba indignada con que la relacionasen con el caso Bono porque ya no estaba con el manchego”.
Y es que desde marzo de 2010 este periódico viene informando del escandaloso patrimonio de los Bono, que en el momento de su ruptura oficial ascendía a seis millones de euros y tenía un endeudamiento de 900.000 euros. En la capital En el ático de Madrid que acoge la sede social de Saja es donde, al parecer, Ana Rodríguez fijará su residencia. Su “proyecto más inmediato” es vivir en Madrid con su hija Sofía. En la capital viven sus hijos y nietos, y posee dos tiendas de Tous.
domingo, 15 de mayo de 2011
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